Álex Nintendo ha ganado una demanda contra un streamer, Jesse Keighin, que se dedicaba a la retransmisión de juegos pirateados antes de su lanzamiento. Es un movimiento más por parte del gigante japonés en su esfuerzo por luchar contra la piratería. Pero este caso en particular tiene su gracia…
Nintendo gana la demanda contra un streamer «que mandaba en las calles»
Que Nintendo presente demandas no es especialmente sorprendente en los tiempos que corren. La compañía, por ejemplo, está inmersa en una pelea legal con los creadores de Palworld (por cierto, han perdido una demanda recientemente en Japón, en la que intentaban patentar la captura de monstruos). También han denunciado a un moderador de Reddit por una suma millonaria por piratería.
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Así que, no debería sorprendernos que Nintendo haya presentado una demanda contra un streamer de juegos pirateados de la compañía y, además, mostrados antes de su lanzamiento. Lo que quizá resulta más sorprendente es la supuesta reacción del streamer, según la compañía. Keighin habría enviado una carta donde «presumía de tener ‘mil cuentas secundarias para hacer stream’ y que ‘podía hacer esto todo el día'» (la popular frase del Capitán América).
Y, según informan Eurogamer y Torrent Freak, también publicó en Facebook que «(Nintendo) debería haber hecho más investigación sobre mí. Puede que mandéis en una compañía. Yo mando en las calles (‘You might run a corporation, I run the streets’). Teniendo en cuenta estos antecedentes, no sorprende saber que un tribunal federal de Colorado, en Estados Unidos, aceptó la demanda.
Una multa de 17 500 dólares
El tribunal ha condenado a Keighin a pagar 17 500 dólares a la compañía. El juez que presidía el caso, sin embargo, ha rechazado dos ordenes judiciales que solicitaba Nintendo. La primera estaba relacionada con la destrucción de los dispositivos utilizados para poder jugar a esos juegos pirateados, antes de su lanzamiento. La segunda, para los terceros que estuvieron involucrados en su actividad.
Sin embargo, el juez estimó que la primera solicitud era «confusa» y «poco razonable» porque Keighin usó servicios de emulación online. En el caso de los terceros, el juez desestimó el mandato porque Nintendo no supo especificar quiénes eran esos terceros responsables. ¿Y por qué 17 500 dólares? El desglose es de una multa de 10 000 dólares por la última infracción de Keighin, que hizo stream de Mario & Luigi: conexión fraternal.
Los 7500 dólares restantes son el resultado de 15 multas diferentes, de 500 dólares, por infracciones previas de las medidas antipiratería de Nintendo. La compañía lleva años peleando contra la piratería de sus productos y está claro que llegará hasta donde sea necesario. La pregunta es si este tipo de medidas, realmente, tendrán efecto en aquellos que están pensando en seguir con estas prácticas…
