Víctor Ayora La Queens Cup entra la próxima semana en la fase de playoffs. El torneo concluirá en México con una nueva Finalissima que coronará a las campeonas. Igual que la Kings Cup, la competición femenina también se acerca al final, aunque con una diferencia importante: la Kings tiene asegurado su futuro con el Mundial y un nuevo split. ¿Pero qué pasa con la Queens League? Totakeki, presidente de Saiyans, ha dejado un mensaje que suena a despedida.
Su equipo cayó eliminado este fin de semana tras no conseguir plaza en los playoffs, por lo que deberá esperar al siguiente split para volver a competir. Si es que lo hay. Totakeki aseguraba que «nadie sabe lo que pasará con la competición». Sus palabras se suman a las de Sara Ismael, que desde el inicio de la copa ha hablado de «último baile».
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Podría pensarse que la futbolista de PIO se refería a su propia etapa en la Queens League, quizá a una decisión personal de abandonar la liga. Sin embargo, uniendo sus declaraciones con las de Tota, podría tratarse de algo más.
«Nadie sabe qué pasará con la competición, pero os aseguro que aquí he sido muy feliz», escribió en una story de Instagram. «Sentí los colores desde el minuto 1. Cada viaje y madrugón valió la pena. Os quiero muchísimo, habéis hecho una familia, tanto dentro como fuera del campo».
Totakeki habla desde el corazón sobre su paso por la Queens League y, especialmente, por el tiempo al frente del equipo femenino de Saiyans. «Os elegiría mil veces más», concluye.
Para esta edición, la Queens ya había sufrido cambios profundos: la competición comenzó con 10 equipos en lugar de 12. Kunitas se marcharon a México, mientras que Aniquiladoras y xBuyer Team desaparecieron del mapa. Para completar el cuadro se llamó a Marina Rivers y Lucy Borón, presidentas de Las Pilares, el equipo revelación y una de las grandes alegrías del torneo. La mayoría de aficionados desearía que regresaran en el futuro.
Aun así, visto lo visto, el futuro de la Queens League genera preocupación. Ojalá haya, al menos, un split más. Pero, siendo sinceros, el horizonte no pinta demasiado bien.
